Es increíble que en pleno mes de octubre se pueda disfrutar de días tan veraniegos. El sábado pasé la tarde en Sanxenxo, disfrutando del buen tiempo y del ambiente de las terrazas. Aproveché el atardecer para hacerme unas fotos, con el sol de poniente al fondo. Y como el tiempo es tan bueno, me puse un vestido blanco con encaje de Zara niños, un cinturón vintage que encontré en el armario de mi madre y unas botas de Zara, acompañados de un bolso de CH Carolina Herrera y una pañoleta a modo de turbante, algo que me parece muy favorecedor.